Lunes
por la mañana el aburrimiento se hace conmigo y con toda la gente de mi
clase. No creo que nadie en el instituto, suporte ese dichoso día,
después de a verlo pasado también en un fin de semana. Al sentarme en mi
pupitre tenia a la gente de siempre, sobre todo a Érica la mujer que me
volvía totalmente loco, me gustaba. Ver a esa chica de largo pelo
castaño, ojos grandes y azules. Unos labios que desearía besar sin
cesar, sus pechos o el resto de su cuerpo lo habían imaginado tantas
veces en mis ratos de soledad. Pero lo poco que podía observar es que
esos dos tesoros eran pequeños y apetecibles. Al lado mío se sentaba
Jessica una chica con el pelo extremadamente rizado de un color rubio
bastante chillón, unos pequeños ojos grises tras unas diminutas gafas y
unos finos labios aniñados. Su débil cuerpo escondía a la mejor amiga
que tenia y se sentaba a mi lado. Todos esperábamos a que llegara
nuestra profesora para empezar las clases, poco antes de sonar el timbre
entro en clase Elena me parecía muy atractiva, esa mujer de 31 años
desde el final de la clase donde me sentaba me pareció como un ángel. Su
largo pelo castaño, su gran belleza, su voluptuoso cuerpo levantaba la
atención de mis compañeros de clase. La atención y otras cosas. Ella se
apoyo en su mesa luciendo sus interminables piernas gracias a su mini
falda, también tenia mas desabrochada la camisa que de costumbre.se por
día ver más a un su sujetador negro. Entre sus manos llevaba una lista,
sonrió mirándonos:
-hola chicos recordáis que íbamos hacer grupos para los experimentos de ciencias?
Todos nos miramos unos a los otros, sabiendo que no habíamos preparados esos grupos, Elena volvió a sonreír y acaricio su pelo:
-Sabía que no lo habéis hecho, por eso he preparado yo misma los grupos
Jessica
me miro y con una mirada me di cuenta que deseaba tenerme con ella en
el grupo. Elena fue dando nombres y cerrando grupos. Yo miraba a Érica
deseando estar con ella, pero en pocos instantes mi sueño se esfumo al
ver que no iría con ella porque ya estaba en grupo. Jessica me miro a la
cara y me cogió fuertemente de la mano por debajo de la mesa, sentía
como apretaba mi mano nerviosa, hasta solo escuchar en que grupo estaría
y que no estaría yo hizo que soltara mi mano. Vi que todo el mundo
estaba metido en un grupo menos yo. Elena repaso la lista y se dio
cuenta del problema. Levanto la mirada y localizándome entre sus
alumnos.
-Carlos como se ha quedado solo y sin grupo ira conmigo. Dijo.
Mis
ojos se abrieron como platos, pude observar como la mirada de envidia
de mis compañeros se dirigían hacia mí, estar tanto tiempo con ella creo
que será alucinante.
Una
tarde en el laboratorio del instituto, estaba preparando todos mis
tubos de ensayo con toda clase de líquidos para mezclar sin cesar. Hasta
que escuche como la puerta del aula se habría lentamente, allí esta
ella mi profesora. La mire de arriba abajo tímidamente. Una mujer de
eternas piernas que meneaba lentamente con sensualidad, sus grandes
pechos se deshacían en mi imaginación. Levante mi mirada, pude observar
su eterna belleza. Su rostro aniñado con pequeñas gafas, su largo pelo
castaño hacía que no cesara de sudar por los nervios. Yo cogí los tubos
de ensayo mientras ella se sentaba a mi lado, veía como ella me miraba
con curiosidad tomando apuntes. Me puse a un más nervioso cuando ella
cogió mi mano donde tenía el tubo y escuche su delicada voz:
-¿estás seguro que quieres mezclar ese liquido con ese?
Trague saliva e intente juntar todas mis fuerzas en una contestación que no se notara mis nervios de estar ante ella.
-claro estoy seguro. Le conteste.
Bajo
nuestros ojos esos dos líquidos se mezclaron tomando un color rosita,
comenzó a burbujear y a parecer pequeñas burbujas con forma de corazón.
Elena se quedo alucinada bajo ese extraño efecto que había conseguido
mezclando esos líquidos. Yo comencé a sonreír nerviosamente al ver lo
que avía conseguido. Ella cogió el tubo y lo comenzó a mirar con
fascinación, no sabía lo que había sucedido. Lo acerco a su nariz y lo
comenzó a oler. Me miro sorprendida:
-Tiene un olor dulce.
Me miro sonriendo acercándome el extraño potingue.
-Carlos vamos hacer una cosa, vamos a beber de esto y escribiremos los efectos secundarios, de acuerdo?
Yo
la mire nervioso y acepte su extraña propuesta. Cogí el tubo de ensayo y
le di un trago al líquido de color rosa. Ella me observaba con una
perfilada sonrisa en su rostro, al ver que le avía dado un trago ella lo
cogió y ante mis ojos se trago las últimas gotas del líquido. A Elena
le recorrió un escalofrió por todo el cuerpo, lo sentí yo también porque
ella me cogió fuertemente de la mano. Mire a su escote cuando comenzó a
ancharse ,le salto un par de botones a crecer dos tallas su pecho.
ES UNA HISTORIA DE UNA AMIGA ES DE
ELIZABETH THOR ESPERO QUE OS GUSTE AQUI OS DEJO EL LINK A SU BLOG NO
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