sábado, 8 de noviembre de 2014

Mujeres guerreras cap I

Gina Corano es Helen



Una estrella fugaz fue atravesando el cielo
a toda velocidad, una estrella que se acerba peligrosamente a la atmosfera de
aquel enorme planeta, esa estrella comenzó a tomar forma lentamente a adquirir
una imagen. Era una capsula de rescate que fue cayendo a toda velocidad,
atravesando el azul cielo. Ese planeta tan verde y lleno de vida era donde se estrellaría
esa forma de escape. Dentro de la capsula su tripulante gritaba con fuerza al
saber que con esa velocidad su muerte era anunciada. Cerraba los ojos pensando
en cientas de cosas que habían pasado, por unos instantes el pasado fue pasando
por su mente. El frio tacto de un rifle de asalto era lo que sentía a un en su
frente, esos ojos de locura mirándolo son cesar a un le seguían.

Sentía como su carne se desgarraba, como
los huesos se rompían y su boca se llenaba de sangre. Sentía como sus músculos
se retorcían sin cesar. Cerró lentamente los ojos sabiendo que por la presión su
cuerpo acabaría explotando, pero era tanto dolor que no le dejaba morir tranquilo.
Ante sus manos destrozadas tenia a un la foto de Helen, quería ver antes de
morir a alguien que amaba mas que su propia vida. Quería por unos segundos
volver a estar junto a ella en su cama, volver a sentir sus besos y el calor de
su piel entre sus manos.

La capsula perdió su destino al chocar contra
unas montañas, rebotando contra unos arboles y estrellándose contra un
cristalino y tranquilo lago. La capsula se abrió dejando escapar de su muerte
submarina al joven, comenzó a nadar con todas su fuerzas por poder volver a hinchar
sus pulmones con oxigeno. Al poder llegar a la superficie, comenzó a respirar
con dificultad. Estaba sorprendido por poder respirar aquel oxigeno, tenia
tanta suerte que en aquella galaxia hubiera un planeta con el mismo oxigeno que
la tierra. Miro a su alrededor viendo un mundo extremadamente verde y vivo. Algo
como aquello solo lo había visto en fotos, solo había visto fotos antiguas de
la tierra antes de ser devastada por las guerras y la contaminación. Se sentía diferente,
sentía en su interior como algo hubiera cambiado. Nado asta la orilla con todas
sus fuerzas, al salir del agua sus rodillas se clavaron contra la mojada arena.
Respiro con fuerza mirando su alrededor. Callo contra el suelo observando el enorme
cielo que le rodeaba, observando esas tres lunas que adornaban el cielo. Se llevo
las manos a la cara observando algo extraño, esas manos eran tan familiares como
suaves, se alejaban tanto de sus manos rudas, a su mente volvía la imagen de su
amada Helen, se acarició el rostro sintiendo la suavidad cuasi femenina de una
mejer. Sentía las formas que había estudiado tantas veces de su ser mas
querido. Se levanto lentamente y se acercó al agua cristalina, sus ojos se
abrieron como platos al ver que era la viva imagen de Helen. Acaricio sus curvas
atrapadas por esa ropa de marine. Cayo al suelo sin entender nada, metió su
mano entre los pantalones para confirmar esa extraña pesadilla. No podría ser,
un grito de dolor y desconcierto confirmo que se había convertido en una mujer
en la viva imagen de la mujer que quería.

Blog de Elizabeth Thor

No hay comentarios:

Publicar un comentario